La expectativa tuvo puesta desde un primer momento en la variada y atractiva propuesta artística, como ocurrió en la noche inaugural, con el condimento de la presencia estelar de Santiago Bocha Sheridan, un hijo pródigo de estos lares, que aunque no naciera en Mercedes, como sus hermanos Gringo y Michel, se crió y nació a la música desde esta bendita ciudad.

Lo cierto es que el Museo del Chamamé “Cambá Castillo” recibió la segunda luna, con una cantidad de espectadores virtuales que superaron ampliamente las 80 mil personas. Así, nuestro chamamé atravesó el país y el mundo, con numerosos argentinos que desde otros países enviaron mensajes contando que estaban siguiendo la transmisión a través de distintos medios de comunicación y fundamentalmente las redes sociales.

Volviendo al espectáculo, en esta segunda luna se destacaron el ballet municipal con un homenaje a Ramona Galarza. El regreso de Antonio Vaquero Álvarez (con su propio conjunto), un referente ineludible del fuelle local, quien para sorpresa de todos invitó al Padre Ramón Espinosa, Cura Párroco, al cantar Paiubre Añorado (Y no defraudó!). La Directora de Cultura Municipal, Ana Ferrando Trim le entregó personalmente un merecido reconocimiento a Vaquero, por su trayectoria y este consagrado regreso a los escenarios.

Alrededor de las 02,00hs de la mañana, explotó el Museo Cambá Castillo con la actuación siempre emotiva y vibrante de Santiago Bocha Sheridan, quien abrió con “Leyenda de Itá Hasé” y cerró con “Flores del Alma”, esa plegaria chamamecera de Julián Zini y Mario Boffil, dedicada a las víctimas de la tragedia de Bella Vista, interpretada con el alma apretada de sueños y distancias. Gracias Bocha. Felicitaciones a la Asociación del Chamamé y la Municipalidad de Mercedes por la organización.